"Celos" (oneshot/ Koyashige)

Hola, aqui vuelto con un fic que he escrito ahora mismo en un rato despues de un duro dia de trabajo del que necesitaba escribir para relajarme. Esta vez traigo un oneshot bastante cortito quizas un drable, algo triste y diferente a lo que suelo escribir, pero necesitaba desahogarme, asi que este es el resultado... espero que os guste.

Autor: Saiikeiilove

Resumen: Los celos pueden llegar a ser enfermizos, hasta tal punto de cometer un error y lastimar a la persona a quien jamas lastimarias.

Pareja: Koyashige

Genero: Yaoi, Romantico, Drama

Me habia quedado completamente solo, le habia perdido, y todo por mis estupidos celos. Esa noche le habia echado de mi casa; del apartamento que compartiamos desde hacia un par de meses.. ¿y todo por qué? por mis tontas ideas irracionales.

Caminé hasta la ventana una vez más; retiré un poco la cortina mirando hacia la calle... nada, él no estaba alli.

Sonreí ironicamente y tomé otro trago de la que ya era mi sexta cerveza de la noche. Caminé hacia el sofá sentandome alli completamente a oscuras, tropezando con la mesita central y tirando las latas vacias al suelo. En ese momento ni siquiera me preocupé de recogerlas o de que la alfombra pudiera mancharse con alguna gota de aquel liquido dorado.

Estaba acabado... ¿qué era yo sin Shige? ¿sin la persona que más me habia amado? sin la persona que me hacia sentir especial. Las horas sin él parecian haberse vuelto años.

Aquella pelea volvió a repetirse en mi mente haciendome cerrar los ojos y masajear mis sienes intentando buscar una explicación, pero todo tenia un único sentido; celos..

Unas horas antes...

Oí las llaves y mi mirada se centró en la puerta; era Shige que volvia de madrugada.. enseguida mi mirada se encontró con la suya, sobresaltandole.. me sonrió algo nervioso, y yo solo me acerqué a él.

-¿Con quién has estado?- esa fue mi primera pregunta, él me miró confundido, sin saber por qué le preguntaba aquello.

-¿Como que con quién? con el staff del dorama.- rió sin darle importancia y acabó de entrar al salon soltando alli su chaqueta.

-No me mientas.- mi mirada se clavaba en el suelo, asi como mis propias uñas lo hacian en las palmas de mis manos al apretarlas en un puño.

-Keii.. ¿qué te pasa?- me preguntó acercandose a mi, en ese momento le miré serio.

-Has estado con él ¿verdad? ¡contestame!- alcé la voz al igual que mi mirada sobre él, esta vez le vi mirarme seriamente.

-Keii.. ¿a qué viene eso? ¿a quien te refieres?- él se hacia como que no sabia, y eso me provocó una risita ironica.

-Ese hombre con quien te andas viendo a mis espaldas.- me acerqué más a él acorralandole hasta que su espalda cochó con la pared.

-Solo.. es un miembro del staff...- su voz sonó algo asustada, jamas le habia hablado asi, pero en ese momento, los malditos celos me tenian envenenado.

-Mentiroso...- reí de nuevo y me di la vuelta. -¿por qué no lo reconoces de una vez? ¡dimelo! ¡se un hombre y confiesame que te acuestas con él!- volví a encararle, y cuando golpeé la pared cerca de su cara, él cerró los ojos completamente asustado.

-Has.. has bebido Koyama..- si.. un par de cervezas, y él parecia haberlas visto sobre la mesita. -será mejor que vayas a dormir.- le sentí temblar, aun asi, él mantuvo la calma.

Su mano rozó mi mejilla, pero mi reacción fue apartarla de un manotazo. De nuevo esa mirada.. ¿por qué me hacia eso? ¿por qué me miraba como si le estuviera haciendo daño? no era asi ¿verdad? ¡yo era el que estaba herido! yo era quien veia como mi novio, la persona a la que amaba, se alejaba de mi para acercarse a otro hombre.

Me tomó de la mano y tiró de mi para llevarme a la habitación, pero yo le detuve; todo acabaria ahi, le haria saber que él era completamente mio y de nadie más. Acabamos tumbados alli mismo, en el suelo.. Shige intentó forcejear para deshacerse de mi, pero mis labios rapidamente fueron a su cuello asi como una de mis manos bajó para abrir mi pantalón, y seguidamente hice lo mismo con el suyo hasta bajarlo a al altura de sus rodillas.
 

Él seguia forcejeando, intentando detenerme.. pero atrapé fuertemente sus manos  sobre su cabeza y me incliné sobre sus labios colando directamente mi lengua en su boca.

Shige comenzaba a gemir, pero esos gemidos eran diferentes a los que ya conocia. Sabia que le estaba obligando, aun asi, seguí deshaciendome de su ropa, guiandome entre sus piernas sin siquiera intención de prepararle.

-¡Koyama ya basta! no es divertido ¡basta!- me gritó luchando por escaparse de mi, pero le tenia bien acorralado bajo mi cuerpo.

-Eres mio Shige.. solo mio..- le dije aquello, y de una sola embestida atravesé todo su cuerpo viendo como sus ojos se humedecian en lagrimas, en ese momento, su cuerpo cedió ante mi.

Acabé haciendole mio de la forma más horrible en que pude hacerlo; le habia violado. Si, esa era la palabra.. habia violado a mi pareja, a la persona que más queria en el mundo.

Su mirada se perdió llena de lagrimas mientras su cuerpo yacia en el suelo a medio desvestir. Le miré.. no era la imagen que tenia de él despues de hacer el amor.. y mi orgasmo se mezclaba con algo de sangre entre sus piernas, pero no hubo ni rastro de placer por su parte.

Le observé mientras intentaba incorporarse y cubrirse con su propia ropa.. queria decirle que lo sentia, que me arrepentia.. pero mi voz no queria salir, entonces fue él quien sonrió suavemente, triste.

-¿Es eso lo que crees? ¿que estoy acostandome con otra persona?- solo me preguntó aquello y vi dolor en sus ojos, rabia.. asentí. -entonces.. te lo contaré Koyama.. es cierto, estoy con otra persona.- me sorprendió su respuesta, pero algo dentro de mi me decia que estaba mintiendome.

-Marchate de mi casa.- no era eso lo que queria decirle, pero fueron las palabras que salieron de mi boca.  

Shige no dijo nada, solo se levantó con dificultad, caminó tambaleandose hasta el dormitorio, y alli hizo una maleta con algunas de sus cosas. Al momento salió, me miró y agarró el pomo de la puerta.

-Nos vemos, Keiichiro.- una despedida fria, una mirada dolida asi como su sonrisa.. y una lagrima recorrió mi mejilla cuando la puerta se cerró tras él.

Aquello se repetia en mi mente haciendome sentir más y más hundido. Me sentia la peor persona del mundo, el ser mas rastrero.. me odiaba a mi mismo por hacerle eso. Su cuerpo se habia entregado al mio, se habia rendido ante mi dejando que me ensañara cuanto quisiera, hasta el punto de herirle.

Todo por celos, porque una vez le habia visto hablar con ese apuesto hombre, porque con él parecia compartir conversaciones y conocimientos a los que yo no les mostraba verdadero interes. Pero no era cierto.. solo estaba viendo fantasmas donde no los habia.

Shige me queria; él habia sido el primero en declararse aquella tarde de lluvia en ese parque infantil donde nos cobijamos.

Tan cerca.. podia sentir su cuerpo temblar como entonces, su nerviosismo, sus mejillas rojas e incluso su corazón a punto de estallar. Él me lo habia confesado; despues de los años se habia atrevido a dar ese paso que yo habia intentado evitar por miedo a que nuestra amistad se viera afectada.

Podia recordar perfectamente el brillo en sus ojos cuando mi espuesta a su confesión fue tan solo un inocente beso en sus labios... ¡aquello ni siquiera habia sido una respuesta formal por mi parte! solo la muestra de lo que yo tambien sentia por mi mejor amigo.

Revolví mi cabello y me levanté del sofá mientras me maldecia a mi mismo por ser tan estupido. Salí de casa solo con las llaves y mi movil; llovia a cantaros esa madrugada, justo como aquella tarde.

Corrí todo lo que pude, todo lo que daban mis piernas cansadas. Me sentia empapado; el agua ya calaba mi cuerpo, pero eso era lo que menos importaba, tenia que encontrarle.

Me detuve en su antiguo apartamento; llamé, nada. No habia nadie alli. Varias llamadas a su movil; no conestaba, asi que volví a correr bajo la lluviera creyendo que sabia donde podria estar.

Y justo como yo pensaba... alli estaba él, en aquel parque donde me habia confesado sus sentimientos, sentado en un columpio completamente mojado.

-Shige-chan...- susuré su nombre con voz llorosa y él alzo su mirada.

Pude ver perfectamente sus lagrimas marcando sus mejillas rojas; se confundian con las gotas de agua que resbalaban desde su cabello.

-¿Te has calmado ya?- me preguntó con la voz apagada, y yo solo pude asentir bajando  la mirada. -me alegro..- supe que sonrió sin siquiera verle, y lo unico que pude hacer en ese momento fue acercarme y tomarle de la mano.

Tiré de él llevandole conmigo bajo aquel juego de niños donde nos cobijamos aquella vez. Seguia siento un lugar demasiado estrecho, tanto, que sentia como su cuerpo temblaba de frio.

Le abracé contra mi intentando hacer que entrara en calor, pero él empezó a llorar como un niño partiendome el alma con su llanto.

-He sido un idiota...- susurré sintiendo aquel nudo en mi garganta; jamas podria perdonarme el haberle hecho daño de aquel modo.

Se separó un poco de mi, lo suficiente como para poner sus dedos sobre mis labios, callandome.. y seguidamente fueron sus labios los que sentí sobre los mios.

"¿Por qué me perdonas asi?" me pregunté a mi mismo mientras él me besaba con tanto cariño y dulzura, con tanta entrega, que me hacia sentir mil veces más que no merecia su perdon.

-Porque no podria seguir sin ti.- susurró mirandome a los ojos.

¿Como habia sabido mi pregunta? ¿como podia conocerme de esa manera? y sobre todo.. ¿como habia podido dudar de la persona que más se habia entregado a mi en cuerpo y alma?  jamas volveria a dudar, a dejarme ganar por los celos.. nunca volveria a hacerle daño.. aquella noche, me hice esa promesa.

Fin

Solo diré en mi defensa que todo salió solo y en un momento, necesitaba escribir hoy, y aprovechando que podia quedarme levantada una hora más y no tenia nada más en que distraerme, salió esto, un fic más para mi lista, asi que espero que os haya gustado al menos un poquito, espero comentarios, gracias